lunes, 9 de agosto de 2010

Íntimo y ojalá interactivo

A veces, cuando termino de bañarme, disfruto de quedarme desnuda un largo rato, en mi pieza, sola, tranquila. Secarme de a poco, sentirme la piel. Quizás me cuelgo así, desnuda, haciendo cualquier cosa, como chatear, escribir que me gusta quedarme desnuda...Y muchas de esas veces, me dan ganas de hablarle al tango aquel y contarle de mi condición de desnudez. Pero, solo por el simple placer de que me siento más desnuda si alguien, en especial el tango aquel, sabe que lo estoy.